Cochabamba es conocida principalmente por su gastronomía, y ha sido declarada como la Capital Gastronómica de Bolivia, debido a que es la cuna de una variedad de platos y diversas combinaciones de alimentos. Sin embargo, no todos conocen el lugar exacto donde surgieron estas delicias, ni quiénes son sus creadores; por eso te presentamos 3 restaurantes donde surgieron algunos de platos típicos de Cochabamba.
¿Cómo nacieron los platos típicos en Cochabamba? Aquí te lo contamos.
1) Pique a lo Macho
¿Qué cochabambino no ha probado este exquisito plato? Es un plato típico cochabambino que acompaña festividades, ha sido parte de reuniones familiares e inclusive ha sido el plato principal en eventos sociales, llegando a tocar paladares en distintos lugares del mundo; pero ¿Cómo nace este plato?, Ana María Quiñones Rojas, hija de la creadora y actual propietaria del Restaurante Miraflores, nos relata acerca de este suceso.
«El Pique a lo Macho nace en el restaurant de los esposos Evangelina Rojas Vargas y Honorato Quiñones Andia, quienes en 1969 unieron sus vidas e iniciaron un negocio, del cual ambos tenían amplio conocimiento (él como garzón y ella como cocinera), al que llamaron EL PRADO, por situarse en El Paseo del Prado cochabambino.
Como es de esperarse el negocio prosperó, contando con una nutrida clientela de la cual varios comensales tenían la costumbre, del buen cochabambino, de reunirse los fines de semana para jugar su partido de cacho, compartir con los amigos, comer y beber. Por lo general, estos clientes comían a media tarde y continuaban departiendo hasta altas horas de la noche, cuando las bebidas le exigían al cuerpo algo más de comida, para lo cual Honorato y Evangelina inicialmente tenían en su menú la preparación de diferentes sándwich, pero los clientes exigían otro tipo de comida.
Es así como uno de los tradicionales grupos de clientes, exigían que se les prepare algo diferente para poder picar todos juntos.
El hecho de ser clientes asiduos le dio a Evangelina la confianza de prepararles un platillo con el que agasajaba a sus amigos personales y que consistía en carnes picadas y sazonadas por esas manos expertas, acompañadas de chorizo, papas al bastón, un poco de tomate picado y unos reverendos locotos como sólo los tenemos en la llajta»
Y así nació este famoso plato, que forma parte de uno de los platos típicos de Cochabamba, muy conocido a nivel nacional e internacional.
Un plato que, según relata Ana María, en un inicio era un plato solicitado únicamente por varones, a causa del picante del locoto y que por ese motivo recibe el nombre, y se convirtió en el plato estrella del Restaurante Miraflores.
El Pique Macho forma parte del patrimonio cultural del país y se le han otorgado distintos reconocimientos, uno de ellos, por parte de la Alcaldía de Cochabamba, a través de la Dirección de Turismo, asimismo, por parte de la Gobernación de Cochabamba, e inclusive reconocimientos particulares, por parte de la Asociación de Restaurantes y Ramas Afines de Cochabamba.
2) Otro plato típico cochabambino, el Sillpancho
El Sillpancho ha resonado en los oídos de cada cochabambino desde hace muchas décadas, y ha superado las expectativas, no sólo de paladares nacionales, sino también de forasteros que llegaron al país preguntando por el famoso plato. Remontémonos hasta su creación a través del relato de Julio L ó p e z, nieto de la creadora y actual encargado del área financiera de la Sillpanchería Doña Celia.
«La sillpanchería nace hace más de 80 años con Doña Celia Lafuente, quien tenía un pequeño local en la calle Ecuador, en la zona, que en esa época se llamaba Pampapilas, recibe dicho nombre debido a que existían unas pilas donde los vecinos podían recolectar agua.
Ella en las noches prendía un anafre y comenzó a vender lo que se conocía como bistec, un pedazo de carne con papas y ensalada que se lo presentaba en un papel de periódico. Los vecinos consumían dicho bistec, preparado por mi abuela, ella era muy joven y lo hizo por necesidad, en ese momento.
Entre los clientes, venían estudiantes, de medicina en su mayoría, ya que nos encontrábamos cerca de la facultad, quienes comienzan a manifestarle que no se saciaban con el plato, entonces traían de huevo, de su casa y le pedían que se los añada como huevo frito a su plato; entonces mi abuela, con un poco de marketing criollo, comenzó a comprar el huevo y se los vendía, de esta manera, los chicos ya no traían.
En ese momento, se llamaba el bistec sencillo o el bistec completo, el sencillo era sin huevo y el completo era con huevo. Algunos otros vecinos le preguntaban -¿por qué no le pones más papita?- y cosas por el estilo, entonces mi abuela comenzó a ponerle arroz y ahí es donde más o menos nace la presentación que se conoce hoy; pero seguía siendo sólo una carne el bistec.
Entonces cuando hubo una crisis, después de que mi abuela ya estaba con el negocio, comenzó a aplanar la carne para que parezca más grande, para que rinda más, debido a que en ese momento era muy difícil conseguir carne.
Muchos clientes se quejaban de que la carne era muy aplanada, que ya no era bistec y entre ellos se encontraba un profesor llamado Francisco, que después de tomarse unas chichitas porque había una chichería cerca, se venía a comer un bistec y le decía a mi abuela -dame un sillpa, Celia- porque sillpa en quechua significa delgado, entonces mi abuela le decía -ya, te voy a dar tu sillpa Pancho- y de ahí cada vez que venía le decía -un sillpa para el Pancho- y es así como surgió el nombre de Sillpancho»
De esta manera surge este exquisito plato típico cochabambino, en la ahora conocida como Sillpanchería Doña Celia y es considerado como el embajador culinario de Cochabamba, además de haber recibido múltiples reconocimientos , entre ellos, una medalla Bicentenaria, y distintos reconocimientos por parte del Gobierno Autónomo Municipal de Cochabamba, entre otros.
El Sillpancho es un plato, que hasta la fecha mantiene su receta inicial y conserva esa mezcla de sabor particular, en cada bocado. Además de ser la base del Trancapecho, que es el Sillpancho servido en presentación de sándwich, en un pan de toco y el Atoracoto, un reciente invento con una comida típica del oriente boliviano servida de igual manera, como sándwich.
3) Las Planchitas
¿Quién no ha saboreado una deliciosa planchita, junto a amigos, familiares o quizás solo y ha quedado satisfecho con la variedad de ingredientes perfectamente combinados que la componen? Una Planchita es otro de los platos típicos de Cochabamba, que ha llegado a formar parte de la gastronomía boliviana, tiene mucho éxito y deja satisfecho a quien lo prueba.
Edith Caero Acuña, Gerente Propietaria de Planchitas Originales Norte, nos relata acerca del emprendimiento familiar, el cual sería el primero, a nivel nacional, en preparar dicho plato.
«El restaurante fue creado el año 1981, por mis padres, el señor Luis León Caero Hinojosa y la señora Alicia Acuña Rojas. Ellos preparaban la Planchita sólo para la familia y por la necesidad económica surge el abrir un restaurante pequeño en la final América, este comenzando con una sola planchita, siendo los únicos en preparar el plato de la Planchita en todo Bolivia, de ahí se trasladaron al Campo Ferial.
El año 2015 se tomó la decisión de abrir otro, en la zona norte de la ciudad, para poder dar mayor comodidad a nuestros clientes, formando parte del grupo de Planchitas Originales. El nombre surge porque teníamos una planchita donde se cocinada solamente para la familia y al abrir, por las exigencias de los clientes, se puso el nombre de Las Planchitas. Es así, como llevamos 40 años ya de su creación con el nombre de Planchitas Originales y en la zona norte, cinco años como Planchitas Originales Norte»
Es así como las planchitas forman parte de la gastronomía del país y conservan su recta inicial hasta la fecha, siendo la especialidad de los restaurantes Las Planchitas Originales y Las Planchitas Originales Norte, como expresa la propietaria «el plato estrella en el menú». Asimismo, recibiría distintos reconocimientos, entre ellos, la medalla Alejo Calatayud, además de la satisfacción de los paladares que lo saborean.
Cochabamba, sin duda alguna, cuenta con una diversidad gastronómica y sitios acogedores donde se puede disfrutar un buen plato de comida y en su mayoría, de gran tamaño. Allí donde se reflejan las sazones transmitidas por generaciones, manteniendo el sabor original desde su creación e inclusive proponiendo derivaciones de platos típicos de Cochabamba, que han trascendido sabores convencionales y traspasado fronteras, llevando en alto el sazón de manos bolivianas.
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